Ser una persona de negocios no debe ser una autoproclamación, sino una distinción meritoria otorgada por terceros al individuo que logró desarrollar un conjunto de virtudes y resultados que la distinguen como tal.
Héroes en un realismo utópico, nefelibatas, antagonistas de la historia donde por defecto deberían ser los únicos referentes visibles del que debió ser un hermoso cuento de éxito, superación profesional y personal, pero que por decisión propia desviaron el enfoque hacia el terreno menos productivo de todos, ese donde
“es mejor parecer que ser”.
Hoy no hablare de ese tipo de “héroes”, les hablare directamente a ellos…
¡Hola es contigo! Comenzaré diciéndote que el potencial que necesitas para salir del mundo surreal que te tiene atado a la nada, está en tu cabeza, solo debes canalizar esa energía de forma positiva hacia el terreno correcto y te vas a sorprender de los resultados.
La primera invitación que te haré es a construir en silencio, si haces ruido mientras estas levantando los cimientos de lo que será el referente por el que te recordarán, muchos serán los que van a atentar contra ellos de forma implacable. Seguramente luego de eso te va a tocar llorar entre los escombros de lo que pudo ser y no fue, buscando culpables… Solo para entender al final de ese doloroso proceso que el mal existe en distintas versiones, lo que hará que a partir de allí entiendas que lo único
100% SEGURO será lo que radique en ti, tu proyecto será tan vulnerable como tu boca y tus acciones así lo dispongan.
Sun Tzu, autor de unos de los tratados estratégicos preferido por mi, escribió:
“Aparenta inferioridad y estimula su arrogancia”.
Dentro del proceso de identificación y planeación de las estrategias que vas a ejecutar, es necesario te reduzcas a tu mínima expresión, cual ratoncito en una inmensa pradera, recuerda… aún no llega el momento de hacer ruido, llegará el punto en que los resultados gritarán por ti. En esta etapa te toca identificar quien
SI y quien
NO, más adelante te darás cuenta que la mayoría de las personas son amigas del campeón.
El éxito tiene un filtro gigante, lleno de trampas cual oasis. Uno de los filtros te hará sentir como en la cima, confort total, este es el punto que tiene como objetivo sacar lo peor de ti, aquí te tratará de llevar a terrenos más oscuros, cual mar de nubes compuesto de arenas movedizas, esas que harán que te entierres tan hondo que terminarás estando kilómetros por debajo del punto donde decidiste comenzar.
Es por eso que hasta no tener un escenario totalmente sólido, está prohibido relajarse. En mis artículos anteriores he hablado de la caída de los colosos, esos indestructibles que aspiraron ser, pero que por su arrogancia y falta de códigos terminaron enterrados en el
“Cementerio de los que nadie recordará”.
De cualquier forma que decidas iniciar en serio, por lo tuyo… Sin películas o historietas llenas de fantasía, estará bien. Mírate en un espejo, háblate a los ojos, sincérate y hazte entender que para conquistar cualquier resultado positivo primeramente te necesitas a ti.
Dentro de ti confluyen un conjunto de pasiones que para dar con ellas es necesario ver con la mente y no con los ojos. La mayoría de las personas ven con los ojos; ciérralos, entra en tu cabeza, busca… yo te aseguro que encontrarás todo lo que necesitas para no ser otro
“Campeón de Ningún Lugar”.